Numerosas son las calles de Madrid, como para saber, quien es cada ilustre personaje que figura en las placas. Pero es interesante conocer, poco a poco, quién es o fue, cada quién en esta ciudad.
León Gil de Palacio Nació en Barcelona el 7 de abril de 1778, ingresó en 1796 como cadete en la compañía de infantería fija de Rosas, llevando a cabo más tarde sus estudios en la Academia Militar de Matemáticas y Fortificación de Barcelona, y obteniendo en 1800 el empleo de subteniente de la citada unidad. Cuando estaba a punto de embarcar en Barcelona con destino a América, estalló la Guerra de la Independencia, en la que intervendría activamente. Resultó dos veces herido y cayó prisionero en una ocasión de la que logró evadirse.
En 1826 se encuentra en Valladolid fuera de servicio, situación que supo aprovechar para dedicarse a la construcción de modelos topográficos como el de la ciudad de la que hablamos: Madrid. Este trabajo, le supuso ser nombrado en 1828 académico de honor y de mérito de la misma, en la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción.
Durante la visita de Fernando VII a Valladolid en el mes de julio del 1828, el rey tuvo la oportunidad de ver la maqueta de Gil de Palacio, la cual una vez finalizada fue trasladada al Real Gabinete Topográfico (que creado por Fernando VII en Madrid se ubicaba entonces en el Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro), donde permaneció hasta 1854 en que fue reubicada en el Museo de Ingenieros. En 1877 el Ayuntamiento Vallisoletano la reclamó y la conservó en el Archivo Municipal donde permaneció dos años, pasando en depósito al Museo Arqueológico de la ciudad. Si bien su pérdida debió producirse en 1883, aún se conserva una pieza de la misma época aunque independiente de la maqueta perdida.
Con este breve texto, ya sabemos un poco más de Don León Gil de Palacio, y de paso, os informamos que hemos trasladado nuestra sede a la calle que lleva su nombre, concretamente en el local número 12, con acceso desde la calle Téllez, número 23. Un espacio luminoso, actual y hecho a nuestra medida, donde, seguiremos haciendo lo mejor que sabemos hacer.